Incluso una revisión superficial del cannabis revela que el mercado ha sido notoriamente derrochador, contaminando el medio ambiente con fertilizantes químicos, pesticidas mal utilizados, plantas contaminadas y, tal vez lo más problemático, envases irreflexivamente excesivos.
La industria necesita urgentemente prácticas sostenibles, y la forma más fácil de iniciar una nueva tendencia impactante es desde afuera hacia adentro: es decir, ajustando la forma en que empaqueta sus productos.
El cannabis ha progresado: es hora de que sus envases hagan lo mismo
Cuando la legalización comenzó a extenderse por todo el país, la industria ya tenía varias décadas de experiencia operando clandestinamente. Con esa discreción surgieron muchos hábitos innatos para no llamar la atención y, en el caso del embalaje, la atención se centró únicamente en no parecer un producto de cannabis.
Una sobreabundancia de plástico ya no es suficiente, no solo en lo que respecta al respeto al medio ambiente, sino también a la integridad del producto en sí.
Hoy en día, una mayor legalización otorga a los operadores la libertad de expandirse sin temor a ser vistos y, como resultado, ya no hay excusa para que el desperdicio de empaques sea la norma en la industria. Los frascos de vidrio, los Ziplocks y una sobreabundancia de plástico ya no son suficientes, no solo en lo que respecta al respeto al medio ambiente, sino también a la integridad del producto en sí.
Cómo el almacenamiento sostenible optimiza el curado y la vida útil de las flores
En cuanto al proceso de curado, se utilizaban cubos herméticos, que ocupaban mucho espacio y no eran nada eficaces para mantener los niveles de humedad ideales del cannabis. Desde entonces, cambió a envases atmosféricos pasivos, que utilizan una tecnología cada vez más popular para tener en cuenta la humedad y la sostenibilidad. Los cubos no dejaban salir humedad. Además de eso, puedes imaginar cuánto espacio ocupan 165 cubos de cinco galones en un espacio de cultivo.
Lo mismo ocurre con el almacenamiento a largo plazo. Con las bolsas con humedad controlada, los operadores pueden estar seguros de que su producto mantendrá su eficacia, porque tan pronto como se sella el paquete, se garantiza que el nivel de humedad se mantendrá igual.